En comunión con la Clausura del Año Santo de la Misericordia, el Arzobispado de la Santísima Asunción dio un regalo misericordioso a los sacerdotes arquidiocedanos ya pensionados por motivos de salud y ancianidad, que desde ayer, domingo 20 de noviembre, se encuentran habitando la flamante Casa Clínica Sacerdotal “Emaús” ubicada en la Ciudad de Luque, a apenas 2 km del límite con la Capital.
La misma ya recibió la bendición inaugural el 15 de agosto del corriente año. La Casa Clínica consta de un solo piso, rodeada de una exuberante naturaleza y un ambiente de paz, habitaciones completamente amobladas con baños privados, comedor comunitario, una sala de videoconferencias, una Capilla y en unos meses más se prevén obras e instalaciones adecuadas para que los pacientes puedan realizar en el sitio sus sesiones de fisio e hidroterapia.
La obra es un proyecto encomendado por el Señor Arzobispo a la Fundación del Clero Arquidiocesano con el apoyo de las todas las comunidades parroquiales de esta jurisdicción eclesiástica. La misma brindará albergue y atenciones a la salud integral hasta a 15 sacerdotes ancianos y/o enfermos.
Desde el día de ayer, Mons. Bartolome Funes Marin, Pbro. Osvaldo Aveiro Stark, Pbro. Ranulfo y el Pbro. Antonio Colman se encuentran en la nueva Casa Clínica. Los mismos pueden recibir la visita de los fieles a partir de las 09:00 hasta las 18:00 hs para compartir con ellos que tanto han dado a nuestra querida Iglesia.
La ceremonia de bienvenida fue presidida por el Monseñor Edmundo Valenzuela, Arzobispo Metropolitano. El Pbro. Dr. Narciso Velázquez, Presidente de la Fundación del Clero Arquidiocesano explicó a los presentes el proceso para lograr la obra edilicia y el equipamiento de la Casa Clínica. Por su parte el Nuncio Apostólico, felicitó a la Arquidiócesis por cuidar de sus sacerdotes en el momento que más necesitan en su vida y destacó el “corazón de mamá” que encuentra en todos los sitios que los católicos paraguayos habitan como hijos de la Santísima Virgen María.
