Evangelio de hoy

MIÉRCOLES DE LA SÉPTIMA SEMANA DE PASCUA

Evangelio según San Juan 17, 1b. 11b-19

“Tu palabra es verdad”

A la hora de pasar de este mundo al Padre, Jesús levantó los ojos al cielo, y oró diciendo: “Padre santo, manifesté tu Nombre a los que separaste del mundo para confiármelos. Cuídalos en tu Nombre que me diste para que sean uno, como nosotros. Mientras estaba con ellos, yo los cuidaba en tu Nombre que me diste; los protegía y no se perdió ninguno de ellos, excepto el que debía perderse, para que se cumpliera la Escritura. Pero ahora voy a ti, y digo esto estando en el mundo, para que mi gozo sea el de ellos y su gozo sea perfecto. Yo les comuniqué tu palabra, y el mundo los odió porque ellos no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. No te pido que los saques del mundo, sino que los preserves del Maligno. Ellos no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. Conságralos en la verdad: tu palabra es verdad. Así como tú me enviaste al mundo, yo también los envío al mundo. Por ellos me consagro, para que también ellos sean consagrados en la verdad”. Palabra del Señor.

Meditación

     Día de la madre y de la patria en Paraguay. La oración de Jesús en este año dedicado al aprendizaje de la oración o a reflexionar sobre nuestro amor al prójimo, que deriva del dejarnos misericordiar por el Señor, es crucial.

    Sobre la evolución y cambios en la convivencia civil, nos ayuda el Mensaje 58 sobre la Inteligencia artificial y la sabiduría del corazón del Papa Francisco: “Nuestro puesto está en el porvenir. Todos han de buscar posiciones allí donde corresponde a cada uno (…), podremos realizar este objetivo si cooperamos noblemente a esta empresa; y a la vez, permaneciendo, en el fondo de nuestro corazón incorruptible, sensibles al dolor que produce la destrucción y el proceder inhumano que se contiene en este mundo nuevo”. La cita pertenece a Romano Guardini, un sabio del Concilio Vaticano II. Podría encantarnos la cita, llenarnos de esperanza o, al contrario, asustarnos al tener noticias de los delitos informáticos y el tráfico de personas, por ejemplo, que afectan a la mayoría de la gente y no sólo a los profesionales y a quienes se acercan a los inventos.

     Se trata no sólo de oportunidades, sino de peligros reales, de problemas técnicos, científicos y políticos, que “es preciso resolverlos planteándolos desde el punto de vista humano”, prosigue la cita. Ante este advenimiento, cómo no aprender a orar, a compartir más allá de los disensos y diferencias, y a ser solidarios, bajo el amparo de la Virgen María, nuestra madre, y guía del Señor Jesús, cuya cruz fue plantada desde la fundación de este bendito Paraguay.

 

¡Reyes de la tierra, canten al Señor!

Oh, Dios, despliega tu poder,

tu poder, oh, Dios, que actúa en favor nuestro.

A tu templo de Jerusalén

traigan los reyes su tributo. R/.