Evangelio de hoy

SÁBADO DE LA SEMANA 22ª DEL TIEMPO ORDINARIO

Evangelio según San Lucas 6, 1-5 

 “El Hijo del hombre es dueño del sábado”

Un sábado, en que Jesús atravesaba unos sembrados, sus discípulos arrancaban espigas y, frotándolas entre las manos, las comían. Algunos fariseos les dijeron: “¿Por qué ustedes hacen lo que no está permitido en sábado?”. Jesús les respondió: “¿Ni siquiera han leído lo que hizo David cuando él y sus compañeros tuvieron hambre, cómo entró en la casa de Dios y, tomando los panes de la ofrenda, que sólo pueden comer los sacerdotes, comió él y dio de comer a sus compañeros?”. Después les dijo: “El Hijo del hombre es dueño del sábado”. Palabra del Señor.

Meditación

Sentido de pertenencia. La pertenencia al pueblo de Dios pasa por sus maestros, legisladores, instituciones, costumbres etc; pero cuando todo ello no ofrece las condiciones principales de una vida coherente con la fe profesada, el pueblo queda desorientado. Si los guías son ciegos, éstos caminan sin rumbo fijo; si los pastores abandonan el rebaño, éstos quedan a merced de los lobos. La situación de abandono y alienación no corresponde a la promesa del Señor.

            Soñar y caminar juntos son, a la vez, realización de una alianza entre Dios y su pueblo. El desafío que hemos de asumir consiste en “caminar en la presencia” del Señor y “afianzar el sentido de pertenencia” al Señor. Esto es, “transitar por via de la justicia como un pueblo santo, unidos a Jesucristo.

            La Virgen María es modelo perfecto de adhesión a la persona de Jesús, a su mensaje y su causa redentora: implica una identificación personal con una comunidad, experimentando una sensación de conexión, aceptación y seguridad como miembro integral de la Iglesia. La Palabra de Dios y los Sacramentos son las motivaciones fundamentales para la vida cristiana: una vida esperanzada que llena el sentido de pertenencia. 

¡Dios es mi auxilio!

Oh, Dios, sálvame por tu nombre,
sal por mi con tu poder.
Oh, Dios, escucha mi súplica,
atiende a mis palabras. R/.
Dios es mi auxilio,
el Señor sostiene mi vida.
Te ofreceré un sacrificio voluntario,
dando gracias a tu nombre, que es bueno. R/.