Elevamos nuestras oraciones al Dios de La Paz, confiando en su misericordia y en su poder para transformar los corazones endurecidos por la violencia. Recordamos que toda vida humana es sagrada, creada a imagen y semejanza de Dios, y que el llamado a la paz es un mandato…

Elevamos nuestras oraciones por las víctimas del trágico accidente aéreo en Ahmedabad, India. Que el Señor les otorgue la paz eterna y brinde fortaleza a sus familias en este difícil momento. Nos unimos en solidaridad con el pueblo indio, acompañándolos en su dolor.

De los sermones de san Máximo de Turín, obispo  84, 3-4; CCL 23, 344-345
LA PURIFICACIÓN DEL AGUA, IMAGEN DE LA IGLESIA

¿Qué debemos decir de los méritos de Eliseo? Su primer mérito es el de haber querido superar a su padre en la gracia, pidiendo que se le concediese más de lo…

I poveri non sono un diversivo per la Chiesa, bensì i fratelli e le sorelle più amati, perché ognuno di loro, con la sua esistenza e anche con le parole e la sapienza di cui è portatore, provoca a toccare con mano la verità del Vangelo. https://www.vatican.va/content/leo-xiv/it/messages/poor/documents/20250613-messaggio-giornata-poveri.html

The poor are not a distraction for the Church, but our beloved brothers and sisters, for by their lives, their words and their wisdom, they put us in contact with the truth of the Gospel. https://www.vatican.va/content/leo-xiv/en/messages/poor/documents/20250613-messaggio-giornata-poveri.html

Cargar más
Evangelio de hoy, miércoles 05 de marzo de 2025
Destacada, El Evangelio de Hoy

Evangelio de hoy, miércoles 05 de marzo de 2025 

Evangelio de hoy

MIÉRCOLES DE CENIZA – TIEMPO DE CUARESMA

Evangelio según San Mateo 6, 1-6. 16-18

 “Que tu mano izquierda ignore lo que hace la derecha”

Jesús dijo a sus discípulos: Tengan cuidado de no practicar su justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos: de lo contrario, no recibirán ninguna recompensa del Padre de ustedes que está en el cielo. Por lo tanto, cuando des limosna, no lo vayas pregonando delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser honrados por los hombres. Les aseguro que ellos ya tienen su recompensa. Cuando tú des limosna, que tu mano izquierda ignore lo que hace la derecha, para que tu limosna quede en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. Cuando ustedes oren, no hagan como los hipócritas: a ellos les gusta orar de pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos por los hombres. Les aseguro que ellos ya tienen su recompensa. Tú, en cambio, cuando ores, retírate a tu habitación, cierra la puerta y ora a tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. Cuando ustedes ayunen, no pongan cara triste, como hacen los hipócritas, que desfiguran su rostro para que los hombres noten que ayunan. Les aseguro que, con eso, ya han recibido su recompensa. Tú, en cambio, cuando ayunes, perfuma tu cabeza y lava tu rostro, para que tu ayuno no sea conocido por los hombres, sino por tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. Palabra del Señor.

Meditación

Al iniciar la cuaresma, la Iglesia nos presenta en este evangelio las tres prácticas que están a la base de la vida y la espiritualidad cristiana: el ayuno, la oración y la ayuda a los necesitados. Éstas, si verdaderamente queremos que nos sirvan para alcanzar, o al menos para crecer en la santidad, deben de tener la característica de “hacerse en secreto”; es decir, es algo entre Dios y yo.

El cristiano debe tener, de manera ordinaria, integrados estos ejercicios en su vida. Sin embargo, la cuaresma, como tiempo particular de gracia para profundizar en nuestra conversión, se nos propone como un espacio en nuestra vida para “reforzar” y consolidar nuestra espiritualidad. Por ello, si de ordinario oras quince minutos, la cuaresma será una oportunidad para aumentar tu oración a veinticinco ó treinta minutos; si de ordinario acostumbras ir a misa sólo los domingos, la cuaresma pudiera ser una buena oportunidad para ir al menos otro día adicional entre semana; si yo acostumbro convivir con mi familia una vez a la semana, pues podría ser la oportunidad para aumentar la frecuencia de dichas reuniones.

Utilicemos esta cuaresma para llegar a la Pascua con cambios concretos en nuestra vida, humana y espiritual, que sean signo del poder del resucitado en nosotros, motivo por el cual estaremos de fiesta.

 

Relacionados

WordPress Theme built by Shufflehound. Arzobispado de la Santísima - ©2025