El «Ciclo Natalicio» comprende dos tiempos litúrgicos íntimamente ligados entre sí: el tiempo preparatorio al Nacimiento del Señor (el Adviento); y el que celebra la llegada y la presencia de Dios en medio de su Pueblo (el tiempo de Navidad).

El Adviento, tiempo de preparación para la llegada del Salvador, señala el inicio de un nuevo Año Litúrgico. En esta ocasión, estará marcado especialmente por la esperanza y también nos ayudará a disponer el corazón para la apertura del gran Jubileo 2025.

Por tanto, queremos vivir este tiempo especial que nos ofrece la Iglesia como «Peregrinos de esperanza», apoyados en temas propuestos por el Departamento Arquidiocesano de Liturgia para estos cuatro domingos, como una invitación a renovar la fe, fortalecer la esperanza y vivir el amor, a la luz de la Palabra de Dios.

Primer Domingo de Adviento: 1 de diciembre

Tema: «Signos de esperanza: orar incesantemente».

Al principio del Adviento, la voz del Señor resuena con fuerza: «Estén prevenidos y oren incesantemente» (Lc 21, 36). En este domingo se enciende la primera vela de la Corona de Adviento, símbolo de la luz que irrumpe en la oscuridad del mundo y vence las tinieblas. La liturgia invita a la vigilancia y a la oración constante, recordando la promesa de liberación del Señor.

Solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Virgen María: 8 de diciembre

Tema: «Signos de esperanza: hacer la voluntad de Dios como María».

Este año, el Segundo Domingo de Adviento coincide con la solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Bienaventurada Virgen María, celebrada con inmenso fervor en nuestro país bajo la advocación de Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé. El «sí» de María se presenta como ejemplo de fe y esperanza para todos los creyentes: «Yo soy la servidora del Señor, que se cumpla en mí lo que has dicho» (Lc 1,38). Encendemos también la segunda vela de la Corona de Adviento, invitándonos a permanecer en vela, como María, a la espera del Salvador.

Tercer Domingo de Adviento (Domingo «Gaudete»): 15 de diciembre

Tema: «Signos de esperanza: practicar la misericordia con alegría».

«¡Grita de alegría, hija de Sión!» (Sof 3, 14). «Alégrense siempre en el Señor. Vuelvo a insistir, alégrense.» (Fil 4,4). La llamada a la alegría resuena por toda la liturgia de este día, y por eso es conocido como el domingo «Gaudete», o «del gozo». Por su parte, Juan el Bautista nos exhorta a practicar la misericordia, recordando que las obras de justicia y caridad son una preparación para la llegada del Mesías. En la Corona de Adviento, encendemos la vela rosada, como símbolo de gozo.

Cuarto Domingo de Adviento: 22 de diciembre

Tema: «Signos de esperanza: creer en las promesas de Dios».

El encuentro entre María e Isabel, relatado en el Evangelio de hoy, destaca la fe de nuestra Madre en las promesas de Dios: «Feliz de ti por haber creído que se cumplirá lo que te fue anunciado de parte del Señor.» (Lc 1,45). El Señor está cerca: en este domingo se enciende la última vela de la Corona de Adviento, anticipando el nacimiento del Salvador. El Adviento culmina antes de las primeras vísperas de la solemnidad de la Natividad del Señor.

Misa de Nochebuena y Día de Navidad: 24 y 25 de diciembre

Tema: «Signos de esperanza: recibir al Salvador».

«Hoy nos ha nacido un Salvador», cantamos hoy con el Salmo 95. Celebramos la Solemnidad del nacimiento de Jesucristo, luz del mundo y esperanza para la humanidad. En estas fechas, los fieles se unen en gozo y adoración al Redentor. Nos unimos con especial fe al Santo Padre, que en la Misa de Nochebuena da apertura a la Puerta Santa de la basílica de San Pedro, y con este gesto, inaugura el Año Jubilar 2025.

Fiesta de la Sagrada Familia: 29 de diciembre

Tema: «Peregrinos de esperanza».

En esta octava de la Navidad, celebramos a la Sagrada Familia de Jesús, José y María, que se presenta como modelo de fe y esperanza, recordando el llamado a las familias a ser testigos del amor de Dios. También hoy, las diócesis de todo el mundo dan inicio al Jubileo en sus territorios particulares, y así, como familia que peregrina en la esperanza, empezamos a avanzar por las sendas del Año Santo.

Solemnidad de Santa María Madre de Dios: 1 de enero

Tema: «Signos de esperanza: construir la paz».

En el inicio del nuevo año civil, la Iglesia celebra uno de los dogmas marianos más importantes: la maternidad divina de María. En este día, se conmemora también la Jornada Mundial de la Paz, implorando la intercesión de la Madre del Cielo para que reine la paz en los corazones, las familias y las naciones.

Solemnidad de la Epifanía del Señor: 5 de enero

Tema: «Signos de esperanza: manifestar al Salvador».

«Epifanía» significa «manifestación», y la visita de los Magos de Oriente resalta la manifestación de Cristo como luz y salvación para todos los pueblos, invitando a los fieles a adorar al Señor y proclamar el Evangelio con alegría.

Fiesta del Bautismo del Señor: 12 de enero

Tema: «Signos de esperanza: renovar nuestro bautismo».

Con esta celebración concluye el tiempo de Navidad, renovando el llamado a vivir como hijos de Dios y anunciadores de su Reino.

Que este itinerario litúrgico inspire a los fieles a abrir sus corazones a la gracia divina y a caminar con esperanza y alegría hacia el nacimiento del Salvador, luz del mundo.