Evangelio de hoy

Viernes de la 5° Semana de Pascua

Evangelio según San Juan 15, 12-17

“Lo que yo os mando es que os améis los unos a los otros”

A la hora de pasar de este mundo al Padre, Jesús dijo a sus discípulos: “Este es mi mandamiento: Ámense los unos a los otros, como yo los he amado. No hay amor más grande que dar la vida por los amigos. Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando. Ya no los llamo servidores, porque el servidor ignora lo que hace su señor; yo los llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo que oí de mi Padre. No son ustedes los que me eligieron a mí, sino yo el que los elegí a ustedes, y los destiné para que vayan y den fruto, y ese fruto sea duradero. Así todo lo que pidan al Padre en mi Nombre, él se lo concederá. Lo que yo les mando es que se amen los unos a los otros”.

Meditación

 El seguimiento de Cristo es entrar en la corriente de amistad con Cristo, como lo expresa el Señor: “ustedes son mis amigos, si hacen lo que les mando”, en donde su corazón está abierto y que no guarda secreto alguno para quien cumple sus palabras. La elección amorosa es para ser testigo del amor de Cristo en todo el mundo.

El laico es un amigo de Cristo que ha iniciado en el Bautismo y debe ir creciendo y perfeccionando en amor mutuo para la santidad de vida. Él llama a todos a descubrir su vida, su verdad, su amistad y proyecto de salvación. Amar es la vocación fundamental del discípulo-misionero que debe ir muriendo en el egoísmo para cristificarse a través de un amor oblativo, ya que “nosotros amamos, porque Él nos amó primero” (1Jn 4,19).

La voluntad de Dios es su mandamiento del amor, cuyo programa de vida debe ser una realidad dando fruto, sembrando la semilla del Evangelio. Un apostolado laical que pueda permear todos los ambientes superando la “acedia paralizante” (EG 81).

Gracias, Padre, porque Cristo, tu Hijo, nos dio la mayor prueba de amor al morir por nosotros en la Cruz, haz que nosotros seamos capaces de imitarlo.