Durante su reciente visita a Roma, el Cardenal Adalberto Martínez Flores, se reunió con representantes del Dicasterio de la Causa de los Santos para consultar la posibilidad que las Reliquias de la beata María Felicia Guggiari Echeverría, conocida como María Felicia de Jesús Sacramentado “Chiquitunga” puedan peregrinar.

Es la primera beata paraguaya y patrona de los jóvenes, como declaró la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP).

“Nos dieron la buena noticia de que se puede realizar la peregrinación de la Reliquia. En mi primer día en Roma visité el Dicastero delle cause dei santi donde me reuní con el Monseñor, Bogustaw Turek, C.S.M.A y conversamos sobre la causa de nuestra Beata María Felicia de Jesús Sacrametado”, informó el Cardenal.

Se habían elaborado dos urnas, una de ellas con los restos de la beata, que quedó en el oratorio de las Carmelitas Descalzas de Asunción, Paraguay, para la veneración de los fieles, y la otra preparada para peregrinar, que recorrería el territorio paraguayo, tratando de cumplir el deseo de Chiquitunga de transitar los rincones más apartados del Paraguay, tal como lo expresaba en una carta, según habían comunicado las Carmelitas Descalzas.

Su proceso de beatificación se inició en 1997, y fue declarada “venerable” en 2010 por el papa Benedicto XVI. La Comisión Teológica del Vaticano aprobó la beatificación de María Felicia de Jesús Sacramentado, más conocida como Chiquitunga, que se concretó el 23 de junio del 2018.

Las urnas fueron diseñadas por las Carmelitas Descalzas de Asunción con la ayuda de la arquitecta María José Chamorro. Están inspiradas en los claustros del monasterio, cada arco contiene una escena de la vida de Chiquitunga adornada con sus característicos jazmines.