SEÑORES

COORDINADORES Y MIEMBROS

GRUPO CAMINO A LA PASTORAL NACIONAL Y LATINOAMERICANA DE ADICCIONES.

 Mis bendiciones y apoyo se dirigen al Curso Pastoral de Prevención, Tratamiento e Inclusión Social de las Adicciones, que se llevará a cabo este fin de semana bajo la dirección del Padre Fabio Antunes Do Nascimiento, Secretario Adscrito a la Secretaria General del CELAM.

Quiero felicitarles por esta valiosa iniciativa de formación, que busca prevenir y sanar a aquellos que sufren las consecuencias sociales de las adicciones. En un mundo donde tantas personas son afectadas por las drogas, es reconfortante ver que existen líderes comprometidos dispuestos a brindar su apoyo y conocimiento para ayudar a aquellos que más lo necesitan.

El Paraguay, al igual que muchos otros países, se enfrenta a desafíos significativos en términos de adicciones y sus consecuencias devastadoras. En este contexto, ustedes, apóstoles de la prevención, desempeñan un papel crucial para generar conciencia, ofrecer apoyo y brindar recursos necesarios para prevenir y tratar las adicciones.

Al seguir el ejemplo del Señor Buen Samaritano, ustedes se inclinan hacia aquellos que han sido heridos en el camino de la vida. La Iglesia se hace presente a través de sus apóstoles de misericordia, extendiendo su mano hacia los vulnerables y necesitados, especialmente los jóvenes. Con sus buenas obras, ustedes proclaman con elocuencia que la esperanza no está perdida.

Es en momentos como estos donde la labor pastoral cobra un significado aún más profundo. A través de la educación, el acompañamiento y el amor incondicional, ustedes están plantando semillas de esperanza y transformación en aquellos que más lo necesitan.

Desde lo más profundo de mi corazón, les deseo un exitoso curso pastoral. Que su labor sea fuente de inspiración para todos aquellos que participan, y que los conocimientos adquiridos se conviertan en herramientas poderosas para marcar la diferencia en la vida de aquellos que luchan contra las adicciones.

Que Dios les bendiga abundantemente en este noble trabajo y que su compromiso y dedicación inspiren a otros a unirse a esta causa de prevención y sanación. Que su labor sea reconocida y apreciada por la Iglesia, la sociedad y que, juntos, podamos construir un mundo más compasivo y libre de adicciones.

¡Que el amor y la misericordia de Dios les guíen en cada paso que den!

Cardenal Adalberto Martínez Flores

Arzobispo Metropolitano

Asunción, 27 de julio de 2023